Luz verde: festival en la segunda parte. Pese a la goleada final, el partido llegó al descanso 0-0 después de una primera mitad trabada en la que, a pesar de la igualdad, el Sevilla mereció irse ganando después de unos muy buenos últimos 5-10 minutos. Sin embargo, el segundo tiempo fue otra historia gracias a que Ben Yedder abrió la lata muy temprano, lo que dejó a los granotas algo descolocado y dio alas a los sevillistas.
André Silva, Franco Vázquez, Sarabia y Promes iban a marcar los goles restantes. Quiero destacar especialmente al holandés, que se ha metido a la afición en el bolsillo después de unos espectaculares dos últimos partidos en los que ha demostrado que desde la banda no hay defensa que se le resista. Fue ovacionado por el Sánchez-Pizjuán. No marcó Roque Mesa, que sí que me pareció también de lo mejor del equipo; y es que el canario es uno de nuestros mejores efectivos cuando está a buen nivel, actuando como un 'box to box' de muy alto nivel.
Luz amarilla: a los "magos" del equipo se les pide más. Bien es cierto que en el segundo tiempo ambos mejoraron y que uno de ellos llegó incluso a marcar, pero todos conocemos las mejores versiones de Éver Banega y Franco Vázquez y sabemos que ahora mismo no están mostrándola. El primero ya dio síntomas de mejora ante el Barcelona, pero queda un largo camino por recorrer y el equipo necesita a sus grandes jugadores en el mejor estado posible para el tramo crucial de la temporada.
Luz roja: problemas en el balón parado. Hablo de algo que solo ocurrió en la primera parte, ya que en la segunda el Levante apenas llegó a nuestra portería en una ocasión después del 1-0. Eso no quita que haya habido algo de tensión puntual al comienzo del partido en los balones al área del Levante debido a la ausencia de Kjaer y Sergi Gómez. Sin embargo, la defensa supo solventarlo y no llegaron a materializar ocasiones. La más clara la tuvieron en una falta que se paseó por el área y que pudieron llegar a rematar hasta 3 jugadores rivales.
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