"Repaso"
Un repaso, eso fue lo que se llevó el Madrid de Lopetegui del Ramón Sánchez-Pizjuán. Los tres puntos se quedan en Nervión después de que el Sevilla venciera 3-0 en un partido en el que fue claramente superior y dominador, controlando en todo momento el encuentro.
Un repaso que comenzó desde el momento en el que el balón empezó a rodar, porque André Silva ya tuvo en el primer minuto una ocasión para marcar con un disparo escorado que Courtois mandó a córner y Ben Yedder tuvo otra en el minuto 8 rematando de cabeza a las manos del portero belga un centro de Sergi Gómez, que hizo un partido colosal con un brutal marcaje a Bale. Los tres centrales rozaron la perfección. También lo intentó el Sevilla con varios centros. El franco-tunecino tendría un disparo claro dentro del área que se le fue arriba por poco.
Todo empezaría a materializarse en goles en el minuto 17, cuando Marcelo perdía un balón robado y conducido posteriormente por Jesús Navas, que asistiría a André Silva. El portugués solo tuvo que materializar ante Courtois un regalo del de Los Palacios. Eran los mejores minutos de una escandalosa primera parte del Sevilla, y el portugués haría el segundo cinco minutos después en un contragolpe de manual que comenzó en un córner del Madrid y acabó con André Silva empujando a la red un rechace de Courtois a un disparo de Navas. Con estos dos tantos, el delantero sevillista se colocaba como máximo goleador de la competición con 6 goles en 6 partidos.
Después del 2-0, Bale golpearía el palo en un disparo peligroso desde la frontal y el Madrid lo intentaría con dos disparos del propio galés y de Kroos que no supusieron peligro. Fue un mero espejismo, porque el partido seguía completamente bajo el control sevillista, con un Éver Banega colosal que movía los hilos y descolocaba a la defensa rival él solo. Franco Vázquez golpeaba el larguero y, en el minuto 40, un córner acabaría en gol de Ben Yedder después de que el 'Mudo' cabeceara al área un despeje.
El partido se iba al descanso, no sin que antes Sergi Gómez pudiera hacer el cuarto con un remate a una falta que se le fue arriba por muy poco y con una buena oportunidad para el Madrid en el último minuto aprovechando una mala salida de Vaclik. El Sevilla se había marcado los mejores 45 minutos de la temporada y la segunda parte comenzaba sin cambios.
Aquí, el conjunto blanco tuvo unos minutos peligrosos buscando una evidente reacción tras ser inferiores en el primer tiempo. Le anularon un gol a Modric después de la revisión del VAR (que actuó correctamente) y tuvieron un par de disparos peligrosos que un Vaclik acertadísimo no dejó que acabaran en gol. Especialmente determinante fue la que le sacó a Bale, un mano a mano que normalmente acaba en gol pero en el que el meta checo cerró espacios como mandan los cánones.
Después de esto, el Madrid ya empezó a decaer y el partido quedó totalmente controlado por el Sevilla, que ya había tenido antes una oportunidad en una carambola dentro del área que acabó con Courtois atrapando el balón desde el suelo. Promes entraba en el minuto 69 para dar descanso a Ben Yedder, que se llevó una enorme ovación del sevillismo.
Las ocasiones iban desapareciendo, ya que al conjunto de Pablo Machín le interesaba que el partido fuera calmándose y fue lo que ocurrió. Los rivales tuvieron dos o tres ocasiones poco peligrosas y desconectaron completamente cuando Marcelo tenía que retirarse lesionado y dejar a su equipo con 10, ya que habían hecho todos los cambios por entonces. Aprovechando esta situación, en el tramo final volvieron las ocasiones sevillistas. Especialmente clara fue una de Franco Vázquez, que la mandó fuera debajo de la portería. Entraron en los últimos minutos Nolito por un Arana cumplidor y fundido y Roque Mesa por un Banega aclamado.
El partido acababa y el Ramón Sánchez-Pizjuán daba por concluida una fiesta tanto en el campo como en la grada. El equipo es momentáneamente cuarto (depende de que el Alavés puntúe o no mañana) con 10 puntos de 13, a unos anecdóticos 3 puntos del liderato y siendo el segundo máximo goleador de la competición con 13 goles. El sábado viajamos a Ipurúa con la moral por las nubes y con la necesidad de seguir sumando puntos, a ser posible de tres en tres.
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