"Justo reparto de puntos en Anoeta"
No pasó del 0-0 el Sevilla en tierras donostiarras, en un partido muy igualado en el que los de Pablo Machín mostraron un alto contraste entre el buen nivel defensivo y la poca efectividad del ataque y poca presencia del centro del campo.
En los primeros 10 minutos, el Sevilla le cedió el dominio absoluto del balón a la Real Sociedad, que sacaría alrededor del 80% de posesión del tramo inicial. Sin embargo, esta posesión no se tradujo en peligro más allá de un centro desde banda derecha que Juanmi conectaba con la cabeza entre los centrales. Su remate no era bueno y no inquietó a Vaclik.
No pasó del 0-0 el Sevilla en tierras donostiarras, en un partido muy igualado en el que los de Pablo Machín mostraron un alto contraste entre el buen nivel defensivo y la poca efectividad del ataque y poca presencia del centro del campo.
En los primeros 10 minutos, el Sevilla le cedió el dominio absoluto del balón a la Real Sociedad, que sacaría alrededor del 80% de posesión del tramo inicial. Sin embargo, esta posesión no se tradujo en peligro más allá de un centro desde banda derecha que Juanmi conectaba con la cabeza entre los centrales. Su remate no era bueno y no inquietó a Vaclik.
Poco a poco, los de Pablo Machín fueron igualando la estadística y dominando más el esférico, aunque con poca pegada arriba debido a la ausencia de André Silva y de Ben Yedder (ambos se perdieron el partido por molestias). La buena presión sevillista y la seriedad con la que la defensa estaba plantada hacían que la Real no tuviera ocasiones claras y que tuviera muchas dudas para sacar la pelota jugada, por lo que las únicas ocasiones de los locales llegaban con jugadas directas. Lo mismo ocurrió en el Sevilla, que utilizaba las mismas vías.
Tras algunos centros sin éxito en ambas áreas, Franco Vázquez filtraba un balón entre líneas a Muriel, que introducía el balón en la portería de Moyá después de regatearlo. Sin embargo, el gol era justamente invalidado por fuera de juego del colombiano. Llegaría algún acercamiento en alguna jugada aislada de Promes para el lado sevillista o con intentonas de Januzaj en el bando txuri-urdin. El belga trató de sorprender a Vaclik con un tiro peligroso desde línea de fondo que se iba a la parte superior de la red. Estuvo atento el portero checo en un rebote que iba a portería tras un despeje de Amadou (muy acertado en la posición de central) y un mal despeje-cesión del propio francés que despejó "in extremis".
El partido fue subiendo su intensidad progresivamente, pero los goles no llegaron y las defensas se imponían a los ataques. Contamos también dos tiros desde la frontal, uno de Banega detenido por Moyá y otro de Januzaj que se fue a saque de portería. Los jugadores se iban al túnel de vestuarios sin goles en el marcador.
La segunda parte fue mucho más loca, con más ocasiones y por rachas. Ya se evidenciaría en los primeros minutos, con un par de intentos en las botas de Navas y otro de Muriel que no vieron portería y centros de Promes y del propio Navas que se iban a córner. Después llegaron unos buenos minutos de la Real Sociedad, donde Janujaz era el claro foco del peligro local. Uno de sus tiros era despejado a córner y otro se iba fuera después de irse de Arana en una jugada que se enfangó. Un poco más tarde, el propio Janujaz metería en el área un peligroso balón que se paseaba por delante de la portería de un Vaclik que tuvo mucho trabajo.
Arana, que estaba bailando con la más fea, era sustituido por un Escudero que no aportó más de lo que el equipo ya estaba dando. También se iría Muriel, que dejó su sitio a un Roque Mesa que está borrándose del mapa. Sandro, que había entrado hace poco, perdía una ocasión clara al trastabillarse delante de Vaclik y los locales apretaban. El Sevilla tenía oportunidades al contragolpe, pero los jugadores no llevaron bien estos lances, que o bien eran lentos o bien acababan con malas decisiones. El ejemplo más claro es un 5 para 3 a nuestro favor en el minuto 88 que moría en las botas de Roque Mesa en el área. También se quedó en nada un centro de Promes al área sin rematador.
Se acababa el partido y los de Pablo Machín se llevaban un punto merecido para la capital andaluza, colocándose provisionalmente segundo con 20 puntos de 33, pendiente del resultado que coseche el Espanyol este lunes, equipo al que precisamente nos enfrentamos el próximo domingo.
La segunda parte fue mucho más loca, con más ocasiones y por rachas. Ya se evidenciaría en los primeros minutos, con un par de intentos en las botas de Navas y otro de Muriel que no vieron portería y centros de Promes y del propio Navas que se iban a córner. Después llegaron unos buenos minutos de la Real Sociedad, donde Janujaz era el claro foco del peligro local. Uno de sus tiros era despejado a córner y otro se iba fuera después de irse de Arana en una jugada que se enfangó. Un poco más tarde, el propio Janujaz metería en el área un peligroso balón que se paseaba por delante de la portería de un Vaclik que tuvo mucho trabajo.
Arana, que estaba bailando con la más fea, era sustituido por un Escudero que no aportó más de lo que el equipo ya estaba dando. También se iría Muriel, que dejó su sitio a un Roque Mesa que está borrándose del mapa. Sandro, que había entrado hace poco, perdía una ocasión clara al trastabillarse delante de Vaclik y los locales apretaban. El Sevilla tenía oportunidades al contragolpe, pero los jugadores no llevaron bien estos lances, que o bien eran lentos o bien acababan con malas decisiones. El ejemplo más claro es un 5 para 3 a nuestro favor en el minuto 88 que moría en las botas de Roque Mesa en el área. También se quedó en nada un centro de Promes al área sin rematador.
Se acababa el partido y los de Pablo Machín se llevaban un punto merecido para la capital andaluza, colocándose provisionalmente segundo con 20 puntos de 33, pendiente del resultado que coseche el Espanyol este lunes, equipo al que precisamente nos enfrentamos el próximo domingo.
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