Este martes 21 de noviembre, se avecina una prueba de fuego en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Visita Nervión uno de los históricos grandes de Europa, el Liverpool Football Club. De este partido puede depender o no la clasificación para los octavos de final de la UEFA Champions League.
El partido de mañana necesita poca presentación. Todos sabemos lo importante que es el partido de cara a la permanencia en la máxima competición continental. La clasificación está muy apretada. Tenemos 7 puntos, uno por debajo del Liverpool y dos por encima del Spartak. Si partimos de la base de que el Spartak debería ganar en su campo al Maribor y ponerse con 8 puntos, la victoria del Liverpool los deja matemáticamente primeros y el Spartak llegaría a Anfield con los ingleses sin jugarse nada y por encima de nosotros, lo que nos dejaría en una situación complicada. Si empatáramos, el Liverpool no tendría asegurado el primer puesto y ganar en Maribor nos clasificaría. Si conseguimos ganar, tendríamos muchas opciones de ser primeros de grupo, pero no está contemplado el fallo.
El once por el que apostaría es Rico, Mercado, Kjaer, Lenglet, Escudero, N'Zonzi, Pizarro, Banega, Sarabia, Correa y Ben Yedder. Yo, personalmente, pondría a Geis en el centro del campo, ha mostrado más ganas que muchos jugadores, además de contundencia y seriedad. También creo que tiene posibilidades de jugar Navas en lugar de Correa.
El Liverpool, por su parte, está haciendo una buena Premier League. Los de Anfield ocupan la quinta posición, con 22 puntos de 36 posibles. Este fin de semana venció 3-0 al Southampton y, de los últimos 10 partidos, solo el Tottenham ha conseguido vencerle (atesora cuatro victorias consecutivas). Sin duda, unos resultados que imponen mucho respeto al rival que enfrentamos.
El error defensivo no es una opción en este partido. Salah, Mané, Coutinho y Firmino constituyen un ataque tremendamente vertiginoso y peligroso que nos puede dar muchos quebraderos de cabeza, tal y como ya hizo en la ida. Debemos cercar las bandas, blindarlas; y para ello hace falta la solidaridad defensiva de los jugadores que estén arriba. El doble pivote debe ser sólido y la defensa no puede dar lugar a la duda, como ocurrió ante el Celta. No se puede especular atrás con el balón y no podemos perder la pelota. Darles opción al contraataque puede ser, prácticamente, un suicidio.
La efectividad ofensiva es fundamental, y está siendo una de las grandes carencias esta temporada. Después de ver su partido el sábado, no vería con malos ojos la titularidad de Muriel. El problema es el de siempre, la ausencia de un delantero puro. Como no lo hay, tenemos que intentar ser un equipo con capacidad de sorprender y fluido en el centro del campo. La labor de Banega en el ataque del Sevilla se antoja fundamental (sería un error ponerlo a ejercer de media punta). El delantero debe ser efectivo y los extremos, peligrosos.
Debemos tener el respeto que el Liverpool merece, pero en ningún caso miedo ni inferioridad. Llevamos 25 partidos sin conocer la victoria en el Ramón Sánchez-Pizjuán y debemos conseguir que sean 26. Tenemos que hacer ver a los ingleses lo difícil que es sacar puntos aquí.
En último lugar, el club ha recomendado a la afición que llegue al campo a las 20:25 horas, ya que tendrá lugar un espectáculo 15 minutos antes del partido. No podemos fallar. ¡Vamos, Sevilla!
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