Luz verde: superioridad desde el minuto 1 hasta el 90. El Sevilla como equipo y varios jugadores como individuales han hecho bastantes cosas bien en el día de hoy, pero lo mejor de todo fue que esto se mantuvo constante a lo largo de todo el encuentro, aunque especialmente sucedió en la primera parte. El cuadro nervionense siempre fue el que llevó la iniciativa, el que controló el partido y sus tiempos y el que buscó la portería rival. La actitud algo más defensiva que tomó el Alavés (un poco más a la espera de encontrar algo a balón parado) hizo que esto se incrementara aún más y casi todo el tiempo vimos un monólogo sevillista.
Hay muchos jugadores a los que destacar, entre los que destaca un Sarabia que asistió en el primer gol y que fue el autor del segundo, formando un tándem indiscutible en la banda (donde, personalmente, me gusta más) junto a un también extraordinario Navas por el que no pasan los años. Munir y Ben Yedder aportaron mucho al juego, aunque al primero le falte aprovechar sus ocasiones, y el centro del campo Gonalons - Roque Mesa cumplió con creces.
Luz amarilla: ¿Hay alguien que sepa sacar el balón parado? Hablemos de un problema que el Sevilla arrastra desde hace ya varias temporadas, los córners y faltas. Desde que están Banega y Sarabia, las sacan casi todas pese a que la mayoría no van donde deben, y sigue sucediéndose. Hoy tuvimos varios balones parados y solo en uno de ellos se generó algo de peligro. ¿No hay más lanzadores?
Luz roja: descompensación en algunas zonas del campo. Si ya he hablado anteriormente del buen nivel que dieron Navas y Sarabia en la banda derecha, también hay que comentar que fue, durante mucho tiempo, la única zona donde el equipo conseguía jugar y donde, de hecho, creó todo el peligro. En la primera parte, casi todo lo que ocurrió fue por ahí, llegándose poco por la banda izquierda y no apareciendo nadie por el medio. En la segunda, Escudero se activó un poco más.
Y es que el vallisoletano estaba bastante solo, porque por delante jugaba Franco Vázquez, quien en vano tendía mucho a irse al centro, y digo en vano porque prácticamente no tocó el balón, con poco ritmo y poca presencia. Otro punto negativo son las quintas amarillas que vieron Navas y Escudero, sabiendo que Aleix y Arana no han dado el nivel y que Wöber se ha lesionado. El partido en Valladolid es de esas trampas ante los equipos que se juegan la vida y Caparrós debe buscar una solución a ese problema.
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