"Caparrós se gana él solo la segunda victoria seguida fuera"
El Sevilla sigue sumando y ya son 9 puntos de 12 (una pena el partido ante el Valencia) desde que se produjo el relevo en el banquillo. Esta vez, el damnificado fue el Valladolid de Sergio González, que aguantó el 0-0 hasta bien tarde, cuando el marcador cayó del lado rojo y blanco.
Las ausencias de Navas y Escudero por acumulación de amarillas hizo a Caparrós cambiar las bandas, aunque manteniendo el sistema de dos delanteros y alineando de nuevo en banda a Franco Vázquez, que caería más al centro para dejarle el carril a Promes. El once inicial lo formaban Juan Soriano, Mercado, Carriço, Sergi Gómez, Promes, Sarabia, Gonalons, Banega, Vázquez, Munir y Ben Yedder.
El Sevilla sigue sumando y ya son 9 puntos de 12 (una pena el partido ante el Valencia) desde que se produjo el relevo en el banquillo. Esta vez, el damnificado fue el Valladolid de Sergio González, que aguantó el 0-0 hasta bien tarde, cuando el marcador cayó del lado rojo y blanco.
Las ausencias de Navas y Escudero por acumulación de amarillas hizo a Caparrós cambiar las bandas, aunque manteniendo el sistema de dos delanteros y alineando de nuevo en banda a Franco Vázquez, que caería más al centro para dejarle el carril a Promes. El once inicial lo formaban Juan Soriano, Mercado, Carriço, Sergi Gómez, Promes, Sarabia, Gonalons, Banega, Vázquez, Munir y Ben Yedder.
Aunque la primera ocasión clara de peligro fue para los sevillistas con un córner rematado por Mercado al larguero, fueron los locales los que salieron con más ímpetu y los que mejoraron con el paso de los minutos, poniendo serias dificultades a una defensa que estaba echando de menos a Navas y que se desordenaba en varias ocasiones. Las más claras llegaron en una falta que despejó mal Soriano y que fue detenida en el rechace con el mismo portero (después hubo un palo con la jugada ya invalidada) y un tres contra el portero donde perdonaron el 1-0 en una ocasión en la que posteriormente se señaló fuera de juego. Keko perdonaría la mejor al mandar fuera un centro que cazó en el área chica y que remató con la rodilla.
El Sevilla no llegaba al área rival, vencido por la defensa pucelana, y se desesperaba con el árbitro, viendo amarillas Banega y Ben Yedder por protestar. Las únicas llegadas venían de las bandas, y cuando menos lo merecía el equipo iba a anotar el delantero franco-tunecino en un córner que ponía dentro de la red. Sin embargo, los arbitrajes iban a perjudicarnos de nuevo, ya que un empujón tan claro como innecesario de Franco Vázquez haría que el árbitro fuera a mirar la jugada tras consultar con el VAR y a anular el gol de forma incorrecta por producirse el empujón antes de que el balón estuviera en juego. El gol anulado anestesió a los locales y el Sevilla se hizo con el partido, pero no tuvo ninguna oportunidad clara. Apenas disfrutó de un tiro lejano y centrado de Banega y un cabezazo largo que Sarabia no materializó. Nos íbamos sin goles al descanso.
La segunda parte sería un monólogo sevillista, que salió más enchufado desde el primer minuto, siguiendo la línea con la que nos fuimos al intermedio. Los locales parecían "conformarse" con el empate e intentaban no encajar para poder dar la sorpresa en alguna acción puntual, pero los que llegaban eran los hispalenses con continuas apariciones por la banda derecha de un gran Promes. Ya en el cuarto minuto, en el saque de un córner, Mercado no pudo rematar porque le agarraron en una jugada que esta vez, casualmente, no se revisó. Además, Ben Yedder tuvo una oportunidad clarísima tras una gran jugada al primer toque de Banega y Sarabia, pero un rebote extraño hizo que golpeara mal y se le fuera por encima del larguero cuando estaba delante de la portería.
El asedio duró unos 15-20 minutos y después el partido se calmó. Aunque seguía siendo dominador, el Sevilla apretaba un poco menos y se habían pasado sus mejores minutos sin haber marcado un gol. Hubo algún acercamiento que no se materializó, como un tiro de Promes que tapó la defensa o un cabezazo blandito de Munir, y el Valladolid tuvo la más clara en un disparo de Waldo que se iba a la escuadra después de un rebote en Mercado y que Juan Soriano mandó a córner con una gran intervención. Iba a entrar Bryan Gil por Franco Vázquez. El canterano cuajó un gran partido que le consolida como una realidad a la que hay que cuidar.
Y ahora llegamos a cuando Caparrós gana el partido, más concretamente en el minuto 80, cuando arriesga con el cambio de Roque Mesa por Sergi Gómez y retrasa a Gonalons. Le salió tan bien que el equipo empezó a llegar más y, solo cinco minutos después, se adelantaba en el marcador con un gol del propio Roque Mesa, que hacía el 1-0 tras regatear a dos rivales y poner el balón pegado al palo desde la frontal. Carriço, por cierto, había realizado dos acciones de mucho mérito en área propia.
Los pucelanos se derrumbaban ante el mazazo psicológico del gol y Caparrós reculaba y daba entrada a Kjaer en lugar de un Ben Yedder que estuvo muy aislado. Ya en el descuento, una carrera de Promes iba a preceder a una asistencia de Bryan Gil para que Munir hiciera el definitivo 2-0 con su primer gol en liga vistiendo nuestra camiseta. El partido se acababa y el Sevilla pasaba al Valencia y se queda a un solo punto del Getafe, quien ganó al Athletic, que se queda ya a 6 puntos. Toca pensar en el importantísimo próximo partido, el derbi del Sábado de Pasión que, además, precede a un crucial Getafe - Sevilla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario