Luz verde: la actitud. Los jugadores asumieron el rol defensivo que Sampaoli propuso y, a pesar de pasarlo mal debido a dicho rol, cumplieron con creces especialmente en defensa. Los jugadores están hechos de otra pasta este año, o al menos eso aparentan hasta ahora. Jugadores como Franco Vázquez terminaron el partido sin oxígeno. Por ejemplo, hablamos de Mercado. En silencio, el rendimiento que está dando está siendo muy alto; no soltó a Higuaín hasta que el árbitro no pitó el final, labor en la que estuvo acompañado por un Nico Pareja que siempre cumple. El delantero argentino apenas pudo rematar cómodamente una vez en todo el partido, y el balón se estrelló en el larguero.
A pesar de no haber visto ese fútbol del que tanto nos habla Sampaoli y Lillo o los propios medios (probablemente condicionado por el partido, el lugar y el rival), el sevillismo está (o al menos yo lo estoy y creo que la mayoría también) contento con el punto. El Sevilla fue capaz de aguantar una embestida italiana en la segunda parte a pesar de empezar el partido titubeante, si bien lo corrigió poco a poco después.
Luz amarilla: el planteamiento. Se ha generado cierta discusión en el sevillismo en torno a este tema: ¿acertó Sampaoli o pecó de planteamiento extremadamente defensivo? Lo cierto es que recordó un poco al que Emery hizo el año pasado, pero con una clara diferencia en las sensaciones y en el resultado. Y más allá de ello, el resultado después le dio la razón.
Aunque, en mi opinión, más allá de haber conseguido no encajar (algo de lo que estoy muy satisfecho y por lo que me voy muy contento con el punto), me gustaría haber visto algo más del Sevilla en ataque. Por supuesto, se hizo bien en no salir al ataque como contra el Espanyol, por ejemplo, ya que si lo hubiéramos hecho podría habernos caído un saco teniendo en cuenta además que el Espanyol es letal a la contra. Sin embargo, llegamos al extremo de no tener ninguna realmente clara en todo el partido (aunque la de Correa si pudo ser peligrosa) y tirar solo 3 veces en todo el partido y una de ellas entre los tres palos.
Luz roja: el uso de la posesión. Ayer, en la primera parte volvimos a dominar en posesión, aunque al final del partido acabamos con un 45%. En casi todos los partidos ganamos la posesión, pero pocas veces hacemos uso de ella en ataque. La posesión es una herramienta para que no te creen peligro si no erras atrás claramente, pero si la usas en el centro del campo no te sirve para anotar.
No hablo solo de este partido, porque en este partido el planteamiento debía ser un poco más defensivo debido el nivel del rival, sino en general. Excepto el día del Espanyol, que fue una barbaridad, el Sevilla no ha sabido qué hacer con la posesión arriba. Está dificultad se irá subsanando (supongo) a lo largo de los partidos, y los buenos resultados ayudan a que pueda hacerse con calma, pero esto no quita que haya que solucionarlo pronto, porque si marcas pocos goles tienes que hacer grandes partidos en defensa (como ayer) para sacar algo.
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