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jueves, 7 de diciembre de 2017

El semáforo: NK Maribor 1-1 Sevilla FC


Luz verde: qué suerte tener un líder como Banega. Hoy Éver lo ha vuelto a demostrar, ha vuelto a dar evidencias de por qué es el mejor jugador de este equipo. Es de esos jugadores que tiene la capacidad de manejar a un equipo. Hablamos de el único jugador con más de 600 pases en la fase de grupos de la UEFA Champions League, hablamos de Éver Banega. Hoy, una vez más, distribuyó el juego y se hizo cargo del equipo, pero no encontró con quien asociarse.

Luz amarilla: referencia ofensiva y portería. Son dos temas que no terminan de convecerme. Empecemos por la delantera. Está claro que Ben Yedder es el único goleador que tiene el equipo, pero es un jugador que cae a bandas buscando espacios y eso deja el área vacía. Hoy ha sido el que se ha movido arriba, el que ha insistido y buscado espacios. Claro, esto hacía que en el centro no hubiera nadie. Una carencia que hay que solventar.

En segundo lugar, la portería. El eterno debate de si Sergio Rico es el portero que un equipo Champions necesita. Hoy ha vuelto a generar dudas con su actuación en el gol del Maribor, en la que no se explica lo que hace. También duda en los centros rivales y le cuesta salir de la portería. A mí, personalmente, es un portero que me genera dudas a pesar de tener buenas actuaciones y partidos en los que salva al equipo. Me falta algo.

Luz roja: lentos, previsibles y faltos de ideas. El Maribor marcó en el minuto 10 y, a partir de ahí, se echó atrás, junto mucho sus líneas y se quedó a la espera del error sevillista. Todo el tiempo que restaba de partido, su propuesta fue esa. El Sevilla no mostró nada para superar esas líneas, y lo cierto es que parece que no lo tenía.

Tocamos mucho el balón, con toques horizontales, fáciles y que no generaban nada. Cuando llegábamos arriba, parecía que no sabíamos que hacer con el balón: o volvíamos atrás o lo intentábamos con centros que no acababan en nada. El juego del Sevilla era lento, tanto física como mentalmente, y muy previsible. No creaba peligro, el área parecía estar muy lejos, y la falta de la referencia ofensiva antes mencionada tampoco ayudaba. La única forma de anotar fue un tiro desde fuera y con ayuda del portero. Mala imagen de un Sevilla que tiene mucho que mejorar, porque se le han visto muy pcoos recursos hoy.

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