El partido que enfrentaba a Getafe y Sevilla en el Coliseum Alfonso Pérez se ha saldado con un 0-1 gracias a un gol que Ganso anotaba de tacón en los últimos minutos.
Los primeros minutos fueron de fútbol pausado, con ocasiones en ambas áreas. Pero esto tardaría poco, el partido rápidamente empezó a recordarnos a todos que solo habíamos ganado una vez en ese campo.
Durante algún escaso tramo, el Sevilla tuvo algún acercamiento desde la banda derecha, pero se quedaron en nada debido a los errores de Mercado, al marcaje asfixiante al que tenían sometido a Navas y a que Ben Yedder caía a banda y esto hacía que no hubiera nadie en el área.
En resumen, cuando el Sevilla atacaba por banda derecha se ahogaba en ella, pero lo peor es que era lo más lejos que llegaba. La lentitud en la creación era enorme, y la falta de ideas colosal. Esto daba muchas facilidades a un Getafe bien plantado, al que era imposible sorprender con ese juego.
Es más, durante muchos minutos fue el conjunto azulón el que asedió al Sevilla. No se lo pensaban dos veces, se quitaban el balón de encima en defensa y en cuanto podían corrían hacia adelante. Aprovecharon el desorden defensivo del Sevilla y entre las que tuvieron destaca una de Amath. Un uno contra uno ante Rico que envió a las nubes después de un pase que llamaría al hueco si no fuera porque los centrales no estaban en el área.
Lo mejor que se llevó el Sevilla al descanso fue el resultado tras unos 45 minutos para olvidar. Pareja fue sustituido en el descanso por precaución, ya que tenía molestias. Entró Lenglet.
La segunda parte arrancó y parecía que no hubiese habido descanso. El Sevilla seguía jugando igual de mal y el Getafe iba a la carga, en un asedio con centros y pases interiores que Pizarro y Kjaer (los mejores del Sevilla) despejaban y cortaban a bocajarro.
A medida que pasaban los minutos, se iba notando el cansancio en el Getafe. Esto sirvió para que el Sevilla tuviera más el balón y con más tranquilidad, pero no con ello se acercaría. Su juego seguía siendo igual de lento y previsible, los intentos de Navas y Nolito desde las bandas se saldaban en pérdidas o malos centros. Las jugadas no llegaban a nada.
Berizzo tampoco anduvo muy correcto cambiando delantero por delantero. Entró Muriel para sustituir a Ben Yedder y después Sarabia reemplazaría a Krohn-Dehli. Pasaban los minutos y el Getafe se acercaba más, pero ninguno de los dos equipos creaba peligro. En una jugada aislada, Mercado centraría un balón raso desde la banda derecha y Ganso haría el único tanto del partido con un bonito tacón allá por el minuto 80.
El Getafe se vino arriba y al Sevilla le tocaba aguantar el arreón final, ya que en ningún momento tuvo la iniciativa del partido. Sergio Rico le haría una gran parada a Jorge Molina en el 89 y, en el descuento, Muriel fallaría un clarísimo mano a mano ante Guaita tras recorrerse (literalmente) medio campo solo.
El Sevilla se lleva los 3 puntos para la capital andaluza aun habiendo sido inferior y vence en el Coliseum Alfonso Pérez por primera vez desde 2009 y por segunda vez en su historia. Toca mejorar mucho y trabajar en el parón para ver un equipo completamente distinto en el partido del 9 de septiembre ante el Eibar y, sobre todo, el 13 de septiembre ante el Liverpool.
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