Luz verde: buenos tramos durante el partido. Ha habido momentos donde era inexplicable que el Valencia fuera ganando el partido, en casi toda la primera parte y en el principio de la segunda el Sevilla tuvo oportunidades más que de sobra. A pesar de que N'Zonzi, Banega y Franco Vázquez no estuvieron al nivel, tuvimos la iniciativa. El problema fue la definición y que el Valencia supo cómo jugarnos.
Luz amarilla: poca velocidad e indecisión en ataque. Como ya he dicho, Franco Vázquez no estuvo bien. Lejos del nivel que dio en los últimos partidos, estuvo bastante lento (no solo de velocidad, sino de movimientos). Esto hizo que las contras se quedaran en nada por falta de peligro. O nos quitaban el balón o les daba tiempo de sobra a replegarse.
Además, a la hora de acercarse al área, nos costaba la vida pegarle. Especialmente dubitativos estuvieron N'Zonzi y Muriel a la hora de pegarle al balón. Excesivos pases o controles de balón cuando el área estaba demasiado poblada.
Luz roja: necesitamos mover montañas para marcar un mísero gol. El partido se ha decidido por la efectividad, esa que al Sevilla le ha faltado y que al Valencia le ha sobrado. Los 'chés' nos marcaron en su primera ocasión y no necesitaron mucho más para hacer el segundo.
Por otro lado, nosotros fallamos todas las que tuvimos. La que perdonó Muriel ante Neto, en la que el propio colombiano le dio al larguero, las manos que Neto le sacó a Sarabia y a Lenglet y los varios tiros que no crearon peligro, todo esto junto con la indecisión comentada anteriormente, acabaron desesperando al sevillismo. Seguimos perdonando ocasiones, veremos a ver hasta dónde nos pasa factura.
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