"Pobre del que quiera robarnos la ilusión"
El Sevilla Fútbol Club se guarda otra noche más para su maravillosa historia, esta vez en uno de los mejores estadios del fútbol europeo y mundial. Los de Montella se meten en cuartos de final de la UEFA Champions League después de ganar 1-2 en Old Trafford, siendo muy superior al Manchester United.
Y lo fue desde el primer momento. El Sevilla controló el partido desde los primeros compases a pesar de que este arrancara con un tiro de Lukaku que se fue desviado y un disparo tapado por Lenglet. Fueron 5 minutos en los que nos pilló más por sorpresa el juego directo y aéreo de los locales, pero rápidamente nos haríamos con el balón y, desde el centro del campo (con N'Zonzi y Banega espectaculares), construiríamos el juego.
Así, llegaban los primeros acercamientos. Correa tendría una de cabeza al remate de un córner, Franco Vázquez dispararía tímidamente y un tiro de primeras de Muriel desde la frontal se iba arriba. El Sevilla llegaba muy bien hasta 3/4 de campo, pero al pasar de ahí se nublaba. Muriel no estuvo fino y lo notó el juego ofensivo del equipo. En este tramo del partido, Banega vio amarilla (por lo que se perderá la ida de los cuartos de final).
Aún quedaría un tiro lejano de Éver Banega que se iba desviado y un disparo que Muriel cruzó en exceso, ocasiones poco peligrosas. Lukaku pudo tener una, pero se le escapó el control ante Sergio Rico y Lenglet. Cabe destacar la enorme actuación del central francés, que sacó una cantidad innumerable de balones, también ayudado por un gran Kjaer.
El Sevilla se iba al descanso siendo superior y mandando en el juego, pero nublándose cuando llegaba arriba, solo Correa desequilibraba. Esa siguió siendo la tónica al arranque de la segunda mitad, en la que Sarabia fue mejorando. El propio Correa tuvo una clarísima al empezar el segundo tiempo, pero el control se le quedó atrás cuando se quedaba solo ante Correa.
El Manchester United tuvo una clara ocasión con un disparo escorado que sacó Sergio Rico. Además, Fellaini y Pogba lo intentaron desde lejos (siendo más peligroso el segundo). Una falta mal ejecutada por Rashford sería la última opción para los ingleses antes del primer cambio sevillista. Ben Yedder entraba por Muriel y este sería el momento clave del partido. En seis minutos, el franco-tunecino marcó dos goles. El primero, con una gran definición después de una asistencia de Sarabia entre los centrales. El segundo, tras peinar Correa un córner y entrando el balón llorando después de que detuviera De Gea casi como si palmeara en una red de voley.
Con el 0-2 la eliminatoria parecía ya sentenciada. Los locales necesitaban 3 goles y Lenglet pudo hacer el tercero de cabeza para ponerle el colofón a un excelso partido. Sin embargo, hubo un momento de susto cuando Lukaku marcaba de cabeza al remate del córner. Los locales ponían el 1-2 y el partido se alocaba, el United se vino arriba y los de Montella se vieron superados por un par de minutos que se hicieron eternos.
Por suerte, todo se pudo controlar e incluso Ben Yedder tuvo la opción de hacer un hat-trick. En una clarísima ocasión, solo ante De Gea y con mucho tiempo para pensar, disparó al muñeco. Finalmente, el 1-2 se impuso y el Sevilla se metió entre los ocho mejores equipos del continente por segunda vez en su historia. Es tiempo de asimilar lo ocurrido, de ser felices y estar orgullosos de la grandísima eliminatoria que ha hecho nuestro Sevilla.
Hoy, váyanse a dormir y sueñen. Sigan soñando, sueñen profundo y con los ojos bien cerrados. Pobre del que quiera robarnos la ilusión...
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