El semáforo: SD Huesca 2-1 Sevilla FC

Luz verde: la insistencia de Navas. Es lo único con lo que me puedo quedar hoy, aunque sea algo muy diminuto. No es que el palaciego haya hecho un gran partido, sino que ha sido el único capaz de crear algo de peligro hoy. No es que se haya internado constantemente por la banda derecha, pero las veces que lo ha hecho ha lanzado algunos centros que podrían haber acabado en gol si hubieran sido rematados.

Luz amarilla: despistes defensivos. Una de las mejores características que había tenido el Sevilla esta temporada hasta hace poco era la solidez defensiva, pero eso se ha perdido completamente. Tener tres centrales en tu once se vuelve una auténtica estupidez cuando alguno de ellos (peor aún si hablamos de los tres) no está a buen nivel, que es precisamente lo que ha pasado hoy.

En el minuto 7 de partido, el primer fallo atrás nos iba a costar el gol que abría el marcador. Tan incomprensible es que Sarabia dejara conducir el balón con tanta tranquilidad al asistente como que Juanpi recibiera en el área sin oposición cuando estaba entre Mercado y Kjaer, habiéndose despistado este último también en otra jugada más adelante que le dio una nueva oportunidad al propio Juanpi para hacer el 2-0 con un disparo dentro del área. Sergi Gómez no apareció en todo el partido y del balón parado prefiero no comentar nada.

Luz roja: equipo hundido y entrenador sin soluciones. El equipo ha ganado un partido de los últimos 10 en liga, solo ha vencido al Levante este año en la competición doméstica. El equipo se cae, le han pasado Getafe y Alavés y le pueden seguir adelantando más rivales esta jornada y la siguiente, y lo peor es que Machín no encuentra solución después de 3 meses y hoy ha quedado más que evidenciado.

En Barcelona se vio que funcionamos mucho mejor con cuatro atrás y dos hombres en cada banda, porque en cuanto volvió al 3-5-2 perdimos el partido. Pues, pese a ello, hoy decidió salir de nuevo con tres centrales y no los cambió hasta el minuto 60, ni siquiera fue capaz de hacerlo en el descanso tras una terrible primera parte. Muchos sevillistas piden su destitución y la directiva debe tomar decisiones, que cuando cobras un sueldo hay que hacer bien el trabajo.