Luz verde: solvencia defensiva. En estos últimos partidos ha sido muy criticada la defensa, la abundancia de goles encajados. Hoy los de atrás han dado mucho más nivel. Bien es cierto que hemos tenido 15 minutos (los últimos de la primera parte) en los que nos han avasallado, pero el equipo ha estado bien atrás, aunque ciertos errores puntuales podrían haberse evitado.
Rami, que no venía cuajando buenas actuaciones, y Mercado, que no estuvo nada bien en Granada, han hecho un partido muy serio, y Pareja ha mantenido el nivel medio de esta temporada. Poco que reprocharles, y nada por ende a un N'Zonzi que ha hecho una segunda parte colosal, recital de omnipresencia y fundamental en el balón parado, despejando todos los balones. Se le ve mucho más cómo cuando está Nasri en el campo.
Luz amarilla: búsqueda del gol. Al final salió bien, pero vimos un Sevilla bastante contenido, diferente al que estamos acostumbrados, que se centró mucho en defender. Esto no es, ni mucho menos, algo malo; pero puede ser peligroso si nos olvidamos de la portería contraria, y lo cierto es que Lopes no tuvo que hacer ninguna parada en todo el partido.
El árbitro se comió un penalti sobre Vitolo, y a partir de ahí llegaron los mejores minutos del Olympique, en los que pudieron haber marcado y mandado al traste el planteamiento. Por suerte, la buena actuación de la defensa y dos largueros contribuyeron a que eso no ocurriera.
Luz roja: actitud ofensiva. Me faltó más intensidad en las contras, más ansia por encontrar un gol cuando se podía. Vitolo fue, sin duda, el más insistente, pero se fue agotando con el paso de los minutos (lógico viendo la carga de minutos que lleva). Influyó también que Nasri no estuviera al 100%, porque cuando lo está contribuye a la inercia ofensiva del equipo.
Sin embargo, se dieron muchas situaciones en las que los jugadores subían solos a la contra, sin prácticamente apoyos, y muchos ataques se perdían. En algunos instantes de partido estos ataques llegaron a ser incluso meros balonazos arriba de los centrales en busca de un poco de fortuna.
Fue en los últimos minutos, cuando el Lyon notaba el cansancio por el esfuerzo en vano, cuando se prodigó un poco más el equipo arriba.
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