Luz verde: la entrega de algunos jugadores sirve para tirar del carro. Cuando las sensaciones generales del equipo no andan bien, son las individualidades las que hay que resaltar. Hoy me quedo con Sarabia, Escudero y N'Zonzi.
Empezamos por un francés que siempre está ahí aunque no lo parezca, que ha sido el mejor en la faceta defensiva, estando en el sitio y sabiendo cómo y cuándo distribuir el balón para sacarlo jugado. Sarabia, el goleador, sigue haciendo mayor su ganga por 400.000€. Un gol más para aumentar unos números de lujo en su primera temporada, ganados con su entrega. Entrega tampoco le falta a un Escudero que sigue siendo el pulmón que oxigena al Sevilla. Acabó fundido tras otro gran partido tanto ofensivo como defensivo, buscando un gol que se le resiste y que Rulli sacó.
Luz amarilla: preocupante falta de gol. Perfectamente podría estar pintado de color rojo. El Sevilla puede buscar el área rival todo lo que quiera, pero nunca llega el gol. Siempre parece que seamos superiores o que merezcamos ganar, pero realmente no es así debido a la falta de ocasiones. Una vez más hoy, el Sevilla no penetró bien entre la zaga de la Real y volvió a quedarse sin la victoria. Ben Yedder falló una ocasión muy clara con 0-0 y esas cosas se notan después.
Luz roja: juego lento y previsible. Sampaoli salió hoy con Franco Vázquez y Nasri juntos en un mismo once inicial y no salió muy bien el intento. El juego se ralentizaba mucho. Cuando el balón pasaba por ellos (especialmente por el francés) se perdía mucho tiempo mientras se controlaba, giraba y ya finalmente daban el pase.
Aunque esto no es solo culpa de los dos mencionados. Al final del partido, con los dos fuera del campo y la Real Sociedad con uno menos, las contras no fluían. El conjunto visitante se encerraba atrás y no sabíamos qué hacer, nos costaba hasta centrar un balón. Un auténtico despropósito.
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